lunes, 27 de julio de 2009

Capitulo 21– NEW YORK

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 Mel, abre los ojos- dijo el acariciándome la cara, yo le solté, pero instante me agarro de la cintura.
 pero que demonios- sentí como me resbala en el suelo, abrí los ojos y vi donde estábamos no me podía creer lo que estaba viendo, estábamos en la cabeza de la estatua de la libertad.-Hugo, no me suelte, por dios-dije temblando, tenia pánico a las alturas, y que las sandalias resbalasen en el suelo, no ayudaba mucho y menos unos tacones de aguja.
 no me digas que tienes miedo a las alturas-dijo sonriendo.
 si, un poco bastante.
 espera, ahora bajaremos de aquí.
 ¿Cómo? No me dejes sola, tengo miedo- dije mientras temblaba y me aferraba a el.
 siento sacar partido de la situación pero…
 pero nada, are cualquier cosa, pero por favor sacame de aquí, quiero tocar tierra.-dije suplicante.
 cualquier cosa has dicho
 si. Por favor…-dije ya casi llorando.
 cierra los ojos- hice lo que me mando, y me agarre mas a el, por extraño que parezca era la primera vez que no quería despegarme de el, podía mas mi miedo a las alturas.-ábrelos- esta vez abrí los ojos primero, antes de soltarle, al ver que estaba en tierra firme, le solté.
 ¡ESTAS LOCO! PODRIAS HABERNOS MATADO.
 no me chilles Mel, has dicho que arias cualquier cosa.
 eso no vale, te has aprovechado.
 te lo advertí, así que ahora te toca escucharme.
 maldita sea. Esta bien, tu ganas.- estabas a los pies de la estatua de la libertad, al lado había un banco y nos sentamos.-tu dirás.-dije derrotada, esta vez me había ganado.
 bien antes de que me interrumpas, quiero que escuches todo, luego ya podrás decir todo cuanto quieras.
 me será difícil, pero lo intentare, no te prometo nada- dije enfadada.
 me conformo con eso; bueno por donde lo habíamos dejado antes-empezó a pensar- a si, ya se; cuando decidiste quedarte a vivir, pues, paso algo yo te deje de ver como a un enemigo, o un trabajo que debía de hacer, te vi tan indefensa, vi que lo que me habían mandado hacer era una salvajada, y no podía hacerlo, así que decidí, seguir con el plan, pero si hacer el plan.
 ¿Cómo?-dije, ya no aguantaba mas, que me estaba diciendo, que había fingido y luego fue el y fingió con los otros.
 Mel, déjame terminar; bueno como te iba diciendo, decidí hacer lo que seguía haciendo todo lo que me mandaban, que te enamorara, cosa que al principio no me importo jugar con los sentimientos de una persona, es decir de ti, pero cuando te fui conociendo, yo…no se como decirte esto, Mel me fui enamorando poco a poco; entonces decidí que seguiría con el plan, y que ya vería como salvarte mas adelante, pero si decía que no a sus planes, entonces estarías en peligro, por eso decidí seguir como si nada pasara, yo te veía a ti feliz, pero yo estaba sufriendo, tu no sabias nada y tarde o temprano , tendría que decírtelo, pero no sabia como- el se agacho y se apoyo las manos en la cabeza y se callo; yo no sabia si creerle o no; pero se le veía tan sincero, era mi Hugo otra vez; fui a acercarme a el , pero me arrepentí a tiempo, y no lo hice.
 Hugo yo…
 Mel, lo siento mucho, creeme, yo tenia… la amaba mas que nadie… pero …ella me ha utilizado, y cuando empecé contigo, fui un cerdo, pero quise remediarlo, y cuando fuimos a Vitoria y paso todo lo de Eneko, vi hay la solución, si tu te quedabas con el estarías mas segura, a salvo.
 Hugo, para, te estas haciendo daño- le tenia que creer, se le veía muy sincero, me acerque a el y le abrace- siento mucho todo esto, yo, no sabes como me duele verte así.
 no Mel, no sientas pena por mí; el día de la fiesta, ¿recuerdas?
 si cuando…
 si ese día, yo sabia que me estabas buscando y hice adrede que me vieras con ella, tenías que odiarme, sino no irías con Eneko.
 pero podríamos haber buscado otra solución.
 o, no la hay, creeme me he pasado muchas noches buscándola, la única es que tu estés con Eneko.
 pero...- el me cayo, colocándome un dedo en la boca.
 pero nada, todo rodaba a las mil maravillas, tu te fuiste con el a pasar los días de pensar.
 como
 lose, y no me digas mas, todo había salido como yo quería que pasara, pero hubo un pequeño problema, Claudia tiene muy mal perder y fue al abuelo a contarle todo lo que había pasado, o mejor dicho como ella creía que había pasado; entonces el me pidió que siguiera con el plan, yo le dije que porque, si a fin de cuentas ya estabas en la familia, parecía conforme; pero esta mañana, bueno mas bien madrugada me hizo llamar y me dijo que te quería viva o muerta, que era tu vida o mi muerte; no tuve elección, si estabas conmigo podría protegerte, si me mataban ya no.
 por que no me lo dijiste.
 te lo dije, en visiones, no lo vistes- entonces me acorde de la visión que tuve.
 si, lo vi; pero yo creí que era una premonición.
 si así fue, quería que supieras, para que avisaras a los demás.
 lo dije, por eso cuando te vimos…entiende.
 lo entiendo, y espero que tú me entiendas que no tuve alternativa.
 si te entiendo, y ahora que vamos ha hacer.-dije levantándome del banco.
 ahora, tener nuestra luna de miel.
 ¿Qué?
 tranquila, no me refiero a consumar el matrimonio, pero si a pasar unos días por aquí, hasta que se calme la cosa.
 pero mis padres
 tranquila, esta todo solucionado, tu hermano se encarga de eso.
 sabia que te iba a regalar un viaje y que estaríamos unos días fuera, tus padre esta al corriente también.
 Hugo, mi abuela ella ha visto todo, ella sabrá…
 no has de preocuparte por eso, tu abuela creería que hacia lo mas correcto, luego si quieres llamare a mi abuelo y hablas con el.
 vale, pero una cosa más, no es un tanto raro, que vayamos vestidos así.
 si también, pero por si no te has dado cuenta es de noche, así que vamos al hotel, luego ya iremos de compras.-me abrazo, y cerré los ojos, en menos de lo que me pude dar cuenta, estábamos delante del hotel; entramos en el hotel y un botones nos abrió la puerta, fuimos hacia recepción y una chica muy amable nos atendió, para mi sorpresa Hugo sabia hablar perfectamente ingles, después de hablar con la recepcionista, Hugo recogió una tarjeta y nos dirigimos al ascensor; fuimos subiendo planta por planta, ya íbamos por la 25.
 ¿a que planta vamos?
 esto a la 43.
 ¿Qué? eso no es muy alto.
 lo siento, de haber sabido que te daba miedo las alturas…
 no pasa nada, tarde o temprano lo tendré que superar, lo tomare como terapia, es algo así como si quieres quitarte tus miedos enfréntate a ellos.
 si bueno, pero depende para que, por que si tienes miedo a la muerte no te vas a matar para enfrentar a tu miedo.
 serás tonto, eso si es que…-llegamos a la planta, Hugo me cogió de la mano, ya no me molestaba que me diera la mano.
 es por aquí- dijo mientras nos dirigíamos a la derecha del pasillo, pasamos varias puertas hasta llegar a la 434.-esta es, yo dormiré en el sofá-yo no dije nada, entramos en ella era inmensa, había un salón, con una barra americana en ella había una cesta de bienvenida; - allí esta la habitación, te he dejado una maleta con ropa tuya.
 gracias-fui hacia la habitación y cerré con pestillo; tenia que pensar, quería ver a Eneko en toda la noche no había dejado de pensar en el, yo lo quiero, pero ahora, ahora el ni sabe que le ame, solo sabe que soy con la que se pelea, y que el cree que no lo soporto, cuando le amo mas que a mi vida; comencé a llorar y me derrumbe en el suelo, con voz suave dije- Eneko si supieras cuanto te quiero.- que mas daba decirlo o no, pero quería decirlo aunque el no estuviera de cuerpo presente, le quería mucho, Hugo le entendía ahora, pero no podía quererlo mi corazón pertenecía a Eneko, aunque ya no lo fuera a tener mas en mi vida.
 Mel, ¿te encuentras bien?-dijo Hugo, desde el otro lado de la puerta.
 si… voy a darme un baño-dije medio lloriqueando y quitándome las lagrimas.
 ábreme la puerta- dijo el muy amable, pero yo no quería abrirle.
 no, primero me baño y luego ya hablamos.
 como quieras, estaré aquí esperando.
 vale- me fui al baño y llene la bañera, eché los botecitos de jabón que eran con el logotipo del hotel; cuando la bañera estaba bien llena, me sumergí en el agua, y quise evadirme del mundo y de todos, peor no podía quitarme de la cabeza a Eneko, mi padre y mi hermano; el me había dicho que estaban bien, pero, y si me estaba mintiendo, tengo que confiar en el, ahora solo le tengo a el; seguí bañándome; después de estar casi una hora en el baño Salí del agua y me rodee con la toalla, fui a recoger el vestido del suelo y un papelito blanco vi en el suelo, me agache y lo cogí; “el conjuro” si lo leía, todo volvería a ser como antes; empecé a dar vueltas por la habitación, si saber que hacer, decidí que por ahora lo guardaría a buen recaudo, me vestí y lo guarde en el bolsillo del vaquero; fui a salir de la habitación cuando escuche hablar a Hugo con alguien mas, al principio no pude distinguir la voz, pero enseguida me di cuenta de quien era, así que sin pensarlo dos veces Salí de la habitación, esa desgraciada me iba a escuchar.
 Hugo cariño, ya estoy…-dije como si no les hubiera escuchado, Hugo se giro y me una sonrisa inundo toda su cara, sin embargo ella en su cara apareció una mirada de asesina, pero yo como si nada- a, hola.-dije acercándome a Hugo y amarrándole de la mano-¿Qué haces aquí?
 nada que a ti te importe-dijo ella
 mira, esto como te llamabas
 Claudia, para que quieres saber mi nombre.
 para no seguir llamándote zorra, pero si te gusta…- fue a darme
 un tortazo, pero Hugo la agarro del brazo, yo sonreí.
 Hugo, ahora la defiendes-dijo ella, muy ofendida.
 no hay por que llegar a las manos no crees.
 ya quitaras esa sonrisa de tu cara.
 lo dudo, pero bueno si quieres pensar así, es tu problema.
 Mel- me dijo Hugo en modo de advertencia.
 bueno que era lo que te iba a decir-dije mientras me rascaba la sien- mira “Claudia” por si no te has dado cuenta, es nuestra noche de bodas-dije señalando a Hugo y a mi- y creo que aquí alguien sobra.
 tu eres quien sobra-chillo ella.
 así no vas bien querida, si haces el favor de largarte.
 tú no eres quien para darme ordenes si quiero estar con mi novio.
 error, ya no es tu novio, recuerdas, se caso conmigo por lo tanto, es ¡mi marido! Ya no es nada tuyo.-ella apretó los puños y yo seguí sonriendo y abracé a Hugo.
 cariño, que te parece que demos una vuelta por la ciudad, tengo algo de hambre.
 si claro, Claudia será mejor que te vayas.
 yo no me voy a ningún sitio.
 o claro que si, largo de aquí.
 he dicho que yo no me voy de aquí, y vosotros dos tampoco.-chillo ella, fui a contestarla pero Hugo se me adelanto.
 Claudia no me montes una escena de celos ahora, sabes por demás que esto iba a suceder, así que venga déjanos a solas-dijo el muy serio.
 claro que lo sabia-dijo ella con tono de rabia- pero ella ya lo sabe todo no hay por que fingir.
 yo creo que si, solo lo sabe ella pero su familia no sabe nada, así que será mejor que desaparezcas ya hablaremos, o quieres que todo lo que hemos ganado se vaya por la borda.
 esta bien me voy- me miro con todo el odio del mundo- yo seré quien te mate con mis propias manos, lo juro-desapareció, yo temblé un poco de miedo.
 tranquila Mel, eso no sucederá, creeme.
 te quiero creer, pero lo veo muy difícil.
 confía en mi, se que es difícil, pero te lo demostrare- le deje de abrazar y le mire a los ojos, quería cambiar de tema.
 tengo hambre.
 vamos a ver que hora es, son las 11 de la noche, no tienes sueño.
 para nada me he desvelado, y el baño que me he dado me ha dejado como nueva.
 veo que la llevas.
 ¿e? de que hablas- me fije que me miraba el brazalete.
 a si, bueno, es un regalo de la madre de Eneko, me gusta mucho.
 será mejor que nunca te la quites, te protegerá.
 no pensaba quitármela.
 ¿Qué quieres cenar?
 No se, estamos en New York, que tal unos perritos calientes.
 si, pero que no le pongan mostaza.
 ¿Por qué no? A mi me encanta.
 ya lo sabia-dijo despeinándome, nos cogimos de la mano y
 salimos de la habitación.
 Hugo
 dime
 no nada- no sabía como decirle, que quería ver a Eneko.
 dime, anda.
 si es una tontería de nada, primero comer, luego ya hablaremos.
 como quieras, pero no quiero que tengamos mas secretos y
 mentiras.
 yo tampoco, aunque todavía me cuesta…entiendeme.
 lo entiendo- salíamos del hotel, yo estaba tranquila dentro de lo que cabe, y me acorde de la cara de Claudia, de su odio y del cabreo que había cogido, pero en vez de asustarme, me sentí llena de felicidad.-en que piensas.
 la verdad
 si, por favor.
 en Claudia, en la cara que a puesto- yo sonreí.
 la verdad que te gusta jugar con fuego.
 no más de lo necesario, me la debía, sino fuera por ella…
 me alegro que lo hicieras, a mi también me gusto.
 deberás, me alegro, aunque me hubiera gustado hacerla rabiar más.
 nunca la había visto tan cabreada.
 que pena, en fin,¿Por qué había venido?
 para que consumáramos el matrimonio.
 mírala que maja, de espectadora ¿no?
 si mas o menos, de testigo.
 va eso da igual ahora-seguíamos andando por la ciudad, los
 edificios eran enormes y las calles muy anchas, más que cualquier otra que hubiera visto en mi vida.
 mira, hay un carrito- nos dirigimos a el, Hugo pidió dos perritos calientes uno con queso y otro con mostaza.
 esto esta buenísimo-dije saboreando el perrito.
 ya te digo, se me había olvidado la ultima vez que comí aquí
 uno.
 ¿habías estado aquí?
 si con Claudia, pero bueno eso es agua pasada.
 ah, oye una cosa, aquí estamos seguros de poder hablar.
 a que te refieres con seguros.
 si podemos hablar de cualquier cosa.
 a ya se que me quieres decir, espera un momento.-dijo una frase en bajo, pero no conseguí entenderla bien,-ya esta, ya nadie nos podrá oír, podemos hablar de cualquier cosa.
 así estoy mas tranquila, si Claudia descubre que tu me has contado todo.
 me mata, sin dudarlo-dijo serio- bueno cuéntame, lo que me ibas a decir antes.
 No se, pero algún día podrías …
 se trata sobre Eneko, a que si.
 si, me refiero si un día podrías recobrarle la memoria lo justo para poder estar con el, sin que el sepa lo que a pasado esta noche.
 si, eso ya lo tenía planeado.
 ¿y eso?
 anda termina de comer el perrito, además, no adelantemos acontecimientos, ahora no podemos hacer nada, seria muy arriesgado, disfrutemos de esta semana de vacaciones.
 y luego… que aremos…no se como reaccionar cuando vea Eneko, o a sus hermanos.
 reaccionaras, como mi novia, así tenemos que hacerlo, no podemos hacer otra cosa por ahora.
 vale, porras se me termino el bocadillo.-dije intentando cambiar de tema, pero seguía pensando en Eneko y recordando la ultima conversación con el, en que me dijo, los buenos siempre ganan; no sabia hasta que punto se había confundido.
 Mel ¿quieres otro? Por que puedo ir a por otro.
 no, no de verdad, no tengo más hambre.
 damos un paseo antes de dormir.
 si, nos vendrá bien para despejarnos.- estuvimos andando mas de una hora, en silencio, Hugo no me dio la mano ni yo a el, andábamos juntos pero callados, hasta que Hugo rompió el silencio.
 Mel, no podemos seguir así de callados.
 que quieres que hagamos, estoy que me muero por dentro.
 lose, yo también estoy así, mi familia tarde o temprano se enterara y entonces…-se callo y dejo de mirarme a los ojos, para mirar al cielo.
 Hugo, todo el mundo cometemos errores.
 si, pero el mío a sido muy gordo.
 eso no te lo voy a negar, pero has rectificado, estoy viva.
 No se cuanto tiempo podré aguantar esta farsa.
 lo que dure duro, no tienes por que lamentarte; yo pude haber desecho todo y no lo he hecho, por ahora tenemos que pensar como deshacer todo este entuerto.
 no te lo deje muy fácil para que salieras de mi encerrona.
 yo tenía otra salida, bueno aun la tengo pero no la he utilizado.
 ¿y eso?
 no puedo decírtela, entiendeme.
 confía en mí, yo no le diré a nadie.
 eso, bueno lose; pero pueden leerte la mente.
 vale, ya me lo dirás cuando llegue el momento.
 por cierto, mi abuela ¿Cómo estará?
 espero que bien, creí que la había matado; ¿llamo a mi abuelo?
 si por favor.-saco el móvil de su chaqueta vaquera, marco.-toma habla tu con el.
 dime Hugo.
 no, soy Melisa.
 a llamas por tu abuela.
 si ¿como esta?
 bien, aunque ahora esta un poco aturdida.
 ha dicho algo.
 si pregunto,¿con quien estabas tu?
 ah, espero que le dijese que estaba con Hugo.
 si eso hice, si quieres te puedo pasar con ella.
 si por favor-mire a Hugo-voy a hablar con ella ahora, esta bien.
 menos mal-dijo el aliviado.
 Mel, cariño ¿estas bien?
 si abuela.
 espero que me perdones, pero debía hacer.
 tranquila lo comprendo, una cosa abuela ¿recuerdas algo de lo de esta noche?
 si claro, lo recuerdo todo, aunque hay una cosa que no tengo muy clara, estaba hablando con Hugo que hiciera algo y desde hay lo tengo todo muy confuso.
 bueno, pues recuperate pronto.
 si, ¿Dónde estáis ahora?
 new york, me ha traído aquí como regalo de cumpleaños.
 has visto, que majo, como me alegro que hayas entrado en razón, el te conviene mas.
 lose abuela, por cierto hay una cosa mas que quería decirte.
 (no le digas que nos hemos casado, ella eso no lo sabe)-me dijo Hugo.
 dime.
 nada abuela, que voy a seguir con Hugo, tu estate tranquila.
 uff, no sabes como me alegra oír eso, pasarlo muy bien.
 si abuela, lo intentaremos.-colgué.- ¿Por qué no has querido que le dijéramos que nos habíamos casado?
 ella no sabe todo, ella solo sabe que estuve saliendo con Claudia y que era una descendiente del enemigo, y utilizo esa información para averiguar quien era la familia y saber donde se encontraban.
 y así se entero que Eneko era familia de…
 no, eso se lo dije yo, no sabia como poner de mi parte a tu abuela, jugué sucio lo se.
 mucho más que eso, la pusiste en mi contra.
 tenia que ser frió, era la única forma que me odiaras.
 lo conseguiste-dije enfadada.
 Mel, ya no me odias
 No se, intento no hacerlo, pero- me puse las manos en la cabeza, y el paró en seco, yo ande mas y me gire y le mire- como quieres que no te odie, quiero odiarte pero a la vez no quiero, no se como debo reaccionar, es tan complicado todo, esto solo se arreglaría si yo muriera, así todos felices.
 te equivocas, prefiero que me odies a que digas que quieres estar muerta, eso no lo digas nunca mas, ¡me oyes!-dijo muy apretando los puños- se que conseguí uno de mis objetivos, y ese es el precio a pagar, por lo que he hecho, es peor que te juzguen a cadena perpetua.
 No se que quieres decir.
 amas a Eneko, te he oído antes, en la habitación, te he escuchado llorar por el, no creas que te lo estoy echando en cara- el dio un paso hacia a mí, yo ni me inmute, el paro en seco- no puedo pedirte que me ames, ya no, con todo lo que a pasado no.
 Hugo yo no te odio…solo que, yo amo a Eneko, no me pidas que le olvide por que jamás lo are.
 yo no te pido eso, si algún día esta en mi mano, que puedas volver con Eneko a ser feliz, creeme lo are.
 gracias- una lagrima corrió por mi mejilla- le hecho mucho de menos.
 lose, pero ahora has de ser fuerte- me acerque a el, y el me abrazo.-Mel, te quiero.
 Hugo, eso no puede ser posible ¿lo sabes?
 si, lose, pero por eso no dejare de quererte, te respetare.
 gracias.
 no has de dármelas, ahora será mejor que vayamos a la habitación, tenemos que descansar ha sido un día muy duro.
 no me apetece seguir andando.
 tranquila no andarás mas- me cogió en brazos y me acurruque en su pecho-cierra los ojos- cerré los ojos y me quede dormida.
 A la mañana siguiente, desperté en la cama con la misma ropa de anoche, mire el reloj eran las 2 de la tarde, o al menos era eso lo que decía el reloj, levante y Salí de la habitación y fui a buscar a Hugo, mira por todo el salón pero no le vi, me acerque al sofá y le vi durmiendo, parecía tan inocente hay durmiendo, pero le vi como movía los ojos, era claro que estaba soñando, fui a despertarle pero cuando fui a hacerlo, comenzó a hablar.
 Claudia, esto es una locura, no puedo traicionar a los míos.- empezó como a llorar- te quiero, pero no soy un asesino, no lo entiendes.- ya no podía verlo sufrir mas, así que le di pequeños toques en el hombro mientras le decía.
 Hugo despierta, ya son mas de las 2 de la tarde.- el abrió los ojos y vio que los tenia húmedos, se los froto, intentando disimular.
 buenos días, tan tarde es ya.
 si, me temo que si.
 quieres que hagamos hoy algo en especial.
 No se, yo no conozco esto.
 yo un poco, pero no creas que mucho mas.
 me imagino, creo que debería llamar a casa, pero no tengo el móvil.
 coge el mío.
 la llamada saldrá muy cara.
 no tranquila, este es otro, es que aquí los móviles de allí no nos valen, este es otro.
 no hablare mucho, es para dejar tranquila a mi madre.
 tú habla lo que necesites, mientras yo pediré que nos suban algo de comida.
 pide algo de chocolate por favor.
 vale- maque el número de casa.
 ¿si?
 Juan soy yo.
 hola enana, que tal te lo estas pasando con Hugo.-oía muy contento a mi hermano, parecía que no hubiera pasado nada, como si solo hubiera sido un sueño.
 bien, algo cansada, me acabo de levantar ahora.
 si que duermes, espera que te paso a Selene.
 hola cuñada, que te gusta new york
 si, es muy bonito, aunque solota he visto de noche- ella también parecía bien, intentaba parecer entera.
 espera te paso con tu madre, a una cosa, portaros bien, no me hagáis tía antes de tiempo.- eso me hizo daño, no sabia ella lo que había dicho.
 anda quita, déjame hablar con mi hija-oí decir a mi madre-hola cariño, ¿Qué tal allí? Come bien y se formal, que ya sabes que yo confió mucho en ti.
 si mama, ahora esta Hugo pidiendo la comida.
 me alegro, y no hagas dietas, vale.
 tranquila, mama tengo que dejarte, han traído la comida, ya te llamare.
 si cariño, llámame cuando vayáis a venir.
 vale tranquila, besos mama.-colgué, no me di cuenta que al lado mío se había sentado Hugo.
 ¿todo bien?
 si, para ellos es como si nunca hubiéramos estados separados.
 te prometí que no les pasaría nada.
 veo que cumpliste.
 podría llamar a Eneko.
 ¿para que? Eso le resultara algo raro.
 le llamare con identidad oculta, solo quiero escuchar su voz.
 vale- estaba marcando los números cuando Hugo me quito el teléfono de las manos.
 ¿Qué haces?
 se me ocurre una idea mejor, dame la mano.
 ¿Qué vas ha hacer?
 no preguntes, si lo piensos dos veces no lo are.
 vale-le di la mano.
 cierra los ojos- cerré los ojos, una parte de mi quería que lo que estaba pensando se hiciera realidad.- ábrelos-mire y estábamos en la habitación de Eneko, el estaba en la cama durmiendo, se le veía tan tranquilo.-el no, nos puede ver, si quieres te doy 10 minutos para que estés con el y hables con el, no puedo darte mas.
 ¿recordara?
 solo lo que yo quiera que recuerde, ahora le are recordar que sois novios, pero de la fiesta nada, el no me vera a mí, cuando pase los 10 minutos, le borrare la memoria y le dejare dormido.
 gracias-dije mientras le abrazaba, intente no llorar.
 serénate, yo estaré vigilando- miro a Eneko y el despertó.
 Mel, ¿Qué haces aquí?-dijo levantándose de la cama.
 te echaba de menos, quería verte- me beso y ese beso para mi fue como el ultimo beso, lo saboree y lo almacené en mi memoria, para recordarlo eternamente.
 ¿te sucede algo?-dijo Eneko mirándome a los ojos, me conocía muy bien.
 no bichito, es solo que te echaba de menos, solo eso- le bese y el me cogió en brazos y me llevo a la cama, se me olvido que allí estaba Hugo, Eneko comenzó a besarme como nunca y yo le respondí, me empezó a subir la temperatura y cuanto mas me besaba Eneko, entonces sentí que algo abajo se empezaba a poner duro, y sabia que no era mío sino de Eneko, solo tenia 10 minutos y no iba a perder mi virginidad delante de Hugo, así con todo el dolor de mi corazón me separe de Eneko, el me miro desconcertado.
 ¿Qué pasa Mel? Estas muy rara.
 no de verdad, es que tengo la regla ¿recuerdas? Y preferiría esperar, todavía no estoy preparada.
 perdóname, esperaremos todo cuanto quieras, te quiero princesa.
 escúchame, yo te quiero mas que a nadie eso no lo olvides nunca.
 Mel, me estas preocupando, ¿seguro que no pasa nada?
 tranquilo de verdad, no me pasa nada, ahora me tengo que ir solo necesitaba verte un poquito, unos mimos tuyos y ya esta.
 ven aquí, te quiero mucho mi niña; nada ni nadie nos separa- escuchar eso, me dieron ganas de llorar pero aguante como pude, le bese y el me respondió.
 bueno ahora si que me voy.
 tan pronto, quédate a dormir.
 (Mel, tenemos que irnos viene Claudia)
 si, te quiero- le di un beso rápido y Hugo me cogió, inmediatamente Eneko quedo dormido; desaparecimos, cuando Hugo me dijo que podía abrir los ojos no podía, por que estaba llorando.
 Mel, lo siento, venia Claudia.
 gracias, no se como podré pagarte esto que has hecho por mi.
 no tienes que agradecerme nada- me dio un pañuelo-toma sécate la lagrimas, y vamos a comer.
 no tengo hambre.
 pero si hay chocolate, venga come un poco.-no me apetecía discutir, después de todo me había dejado estar un poco con Eneko, así que fui a comer con el; pasaron los días y todo parecía normal, era como si fuéramos una pareja normal antes los ojos de los demás, pero no había mas que una relación un tanto extraña como unos amigos que se apoyan mutuamente, pero nada mas; fuimos a distintos museos, incluso hicimos fotos, volvimos a la estatua de la liberta, por el día impresionaba mucho mas que por la noche, cuando llego el día de volver, yo estaba un tanto nerviosa aquí podíamos ser como quisiéramos, pero allí tendríamos que fingir una relación que no existía.
 Mel date prisa, se supone que llegamos dentro de una hora a tu casa.
 si ya voy, pero es que no puedo cerrar la maleta- había comprado demasiadas cosas, bueno me las había comprado Hugo, por que yo no tenia cartera, ni dinero.
 espera que te ayudo, siéntate encima de ella- me senté, pero no hice mucho, así que el hizo fuerza con su mano y consiguió cerrarla.-guala, ya esta todo no
 creo que si, espero que no se nos olvide nada.
 bueno, ha decir verdad si se nos olvida una cosilla.
 ¿el que?
 esto- dijo mostrándome la caja rosa, eran las alianzas, nos habíamos casado pero con las prisas y demás no nos la habíamos puesto.
 a eso.-dijo con la voz baja- es necesario.
 si, será mejor que no levantemos sospechas; me das la mano-dijo mientras habría la caja y sacaba el anillo con la letra H escrita, yo le di mi mano y el me puso el anillo.
 me queda bien- el sonrió cogió su anillo y fue a ponérselo, pero se lo quite de las manos- si me permites, la tradición manda que yo te lo debo poner, así que.
 como quieras, pero no tienes…
 anda calla- le cogí la mano y se lo puse- perfecto, no se nos olvida nada más.
 bueno si una cosa mas, pero esto si que no tienes por que.-me mostró la llave.
 Hugo, yo eso, va de hacer el papel lo hacemos completo, el mío te lo daré cuando lleguemos a casa.
 también lo tengo lo cogí de tu escritorio.
 No se por que no me extraña, dame anda- me lo colgué, junto con el colgante de mi abuela, el se puso el mío.
 ahora si esta todo en orden, los papeles del hotel lo he arreglado ya, solo que dejemos la llave en recepción y ya.
 ve tu yo te espero aquí.
 si mejor-desapareció, al cabo de diez minutos apareció.-ya esta todo, será que nos vayamos ya por que las de la limpieza no tardaran mucho en venir.
 vamos tengo ganas de ver a la familia.
 ¿estas lista?
 si- me abrace a el y cerré los ojos.

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